
La exposición en la Fundación Miró de Palma presenta “Grip Face”, una instalación compuesta por doce esculturas suspendidas que representan máscaras colgadas de cuerdas hechas de espinas, organizadas en la forma del símbolo de la Unión Europea. Esta obra cuestiona el pacifismo europeo y su papel ambiguo frente a conflictos bélicos, mostrando figuras fragmentadas que pueden interpretarse como símbolos de resistencia o amuletos protectores. Inspirada en bombardeos a zonas infantiles en Gaza y Ucrania, la instalación utiliza columpios inmóviles colgados de espinas para reflejar la vulnerabilidad de la infancia en tiempos de guerra. El Espai Cúbic se transforma así en un espacio que invita a reflexionar pausadamente sobre la identidad europea, la memoria colectiva y la delicadeza de la paz actual.